El pueblo más antiguo de Tsakonia, en la ladera del Parnón. Se encuentra rodeado de verdes torrentes con castaños, abetos y plátanos de sombra. Fue declarada población de especial belleza natural y arquitectónica en 1967, y se considera el pueblo más bello de los pueblos de montaña de Grecia.
El pueblo más antiguo de Tsakonia (Gousténitsa en el dialecto tsakonio) se extiende en la ladera del Parnón y las ventanas de sus casas recuerdas ojos con bocas, haciendo que las casas parezcan personas. Se encuentra a una altitud de 840 metros y está rodeado de verdes torrentes con castaños, abetos y plátanos de sombra. Fue declarada población de especial belleza natural y arquitectónica en 1967, y se considera el pueblo más bello de los pueblos de montaña de Grecia.
Todas las casas son de piedra y están encaladas; de hecho, Kastánitsa era un pueblo de encaladores. Sus tejados son de teja de color verde ceniza, y sus patios de arcos y flores.
En la zona norte de Kastánitsa se encuentran la ruinas del castillo de Kapsambelis, al que se puede acceder por el sendero y desde donde se pueden admirar las impresionantes vistas. Se cree que fue construido inicialmente en el siglo XIV por los bizantinos a fin de controlar el camino de la Argólida al valle de Laconia. Tiene una altura de 8 metros y dos troneras. Aquí se refugiaban los habitantes para salvaguardarse de los turcos y en 1810 fue rehabilitado con la financiación del «bandolero» y luchador griego Kapsambelis. Fue derruido en 1945 durante la guerra civil.
Las impresionantes casas - torre de Kastánitsa tienen una historia de 300 años y podrá admirarlas paseando por sus barrios, especialmente el de Pirgos. Son de tres pisos, con pequeños balcones de madera y pequeñas ventanas. La plaza del pueblo ofrece una vistas increíbles que se extienden hasta el golfo Argólico. Sobre el viejo edificio del colegio municipal, destaca la iglesia de la Metamorfosi tou Sotiros (Transfiguración del Señor). Es de 1780 con un iconostasio ruso realizado en Odesa en 1818, regalo de la zarina Caterina la Grande a la Kastanitsioti de Odesa.
Alrededor del pueblo se conservan aún bastantes capillas, de las que la más antigua es la de Ayios Panteleimonas, adonde podrá llegar caminando a través de un hermoso bosque de castaños.
Se trata de la nave dual del monasterio de Ayios Nikolaos Kontolinas, construido a principios del siglo XVI y que fue quemado por los turcos en 1826.
De los molinos de agua que una vez se alzaron fuera del pueblo, hoy solo quedan las ruinas de uno que dejó de funcionar en 1970.
Senderos. Comenzando en la plaza de Kastánitsa, puede realizar una fácil ruta circular a través del bosque y admirar la iglesia de Panayia Barkous y la fuente de Mana. Otra opción es seguir el viejo sendero a Ayios Dimitrios y llegar a la capilla de Panayia Bistolena.
Increíble es también el sendero desde Kastánitsa a Prastós (7,8 kilómetros, señalizado) que comienza en Ai Giorgi. Recorre las laderas orientales del Parnón y era un antiguo camino por el que los dos pueblos se comunicaban. Pasará por bosques de castaños, cedros, plátanos de sombra y encontrará el torrente de Mazia, la ruinas de molinos de agua, capillas y viejas granjas.
La cal de Kastánitsa, como la de Sitaina, era conocida. Su producción fue importante durante los años 50 y 60. Entonces, en el pueblo había 15 hornos en los que trabajaban hasta 200 personas trabajando 15-20 horas al día. El proceso era largo y difícil y para poder elaborar la cal los hornos llegaban a quemar hasta 120 horas.
El bosque de castaños
En el Parnón, los boques de castaños se extienden a lo largo de cerca de 21.000 hectáreas. Alrededor de Kastánitsa se hallan grandes y productivos castañares, aunque en la actualidad la producción es ya muy reducida. Ya desde 1983, cada último fin de semana de octubre es el momento de las castañas. Si se encuentra en Kastánitsa esos días, encontrará mesas con productos y degustaciones (castañas en todas las versiones posibles: asadas, hervidas, en dulces, etc.) y podrá realizar recorridos guiados. Los eventos incluyen música, baile y la organización de «carreras de castañas», es decir, competiciones con una cuchara y una castaña, un juego que adoran especialmente los niños.
En la web de Kastánitsa encontrará recetas con castañas http://kastanitsa.gr
Plátanos y las cataratas de Lepida
Otro pueblo tradicional de la región es Plátanos. Comenzando desde allí, puede realizar un sendero fácil de 30 minutos sobre parte de la garganta del Vrasiatis, donde se forman las cataratas de Lepida, de 70 metros de altura. Es corto y muy hermoso, adecuado para todos. Sin embargo, evite venir en los días de lluvia o nieve puesto que las rocas resbalan.
El sendero comienza a unos 2 kilómetros al norte de Plátanos.
Más información sobre el pueblos en: www.platanoskynourias.gr.
Sabías que:
Kastánitsa se encuentra a 72 kilómetros de Trípoli.
Allí encontrará albergues tradicionales, cafeterías y tabernas que tienen como especialidad - ¡cómo no! - el cerdo con castañas.
En el pueblo aún se habla el dialecto tsakonio.
Encuentre el destino en el mapa interactivo.
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Peloponnese. Greece beyond the obvious
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